Síguenos

La contratación pública en España en el segundo trimestre de 2023: una contratación con municipios a medio gas

El segundo trimestre del año normalmente es como la primavera de la contratación pública. Tras un periodo marcado por el inicio del ejercicio presupuestario en el que la contratación baja de manera importante, los primeros expedientes del año empiezan a generar licitaciones. Esto hace que, normalmente, tras un primer trimestre de poca actividad, haya un crecimiento en el periodo que va de marzo a junio. Este año, sin embargo, hay que considerar que el efecto de las elecciones locales puede haber parte de la contratación  a la espera de lo que van a querer hacer los nuevos equipos de gobierno. 

Por otro lado, a lo largo de 2022 parece que la tensión inflacionista se ha rebajado y queríamos comprobar cómo está siendo la respuesta a esta dinámica en los mercados públicos.

El volumen de la contratación: más contratos que el primer trimestre, pero menor crecimiento que en años anteriores

Empezamos el año con una caída importante de contratos respecto al último trimestre de 2022. Esto es normal tanto por los ritmos  de tramitación de expedientes de contratación a licitaciones, como por el aumento de contratos de suministros para cerrar el ejercicio presupuestario que suele haber a final de año. En este caso ha habido una recuperación del número de contratos, un 10% más que el trimestre anterior, pero muy inferior al crecimiento en años anteriores. Esto puede deberse al parón de cara a las elecciones autonómicas y especialmente locales, de mayo de 2023. El periodo electoral hace que parte de la agenda de contratación se detenga de cara al próximo mandato y para evitar conflictos de promoción de cara a la campaña. Además, incluso en los casos en los que la constitución de las corporaciones sea muy rápida, en términos reales hablamos de cerca de un mes con órganos de contratación mínimos precisamente en las administraciones que más contratos realizan. Si esta conjetura es cierta, posiblemente en el resto del año haya un efecto de compensación, especialmente en el último trimestre para contratos públicos de mayor envergadura. 

Este contexto de contención de la contratación local, especialmente en administraciones pequeñas y medianas donde la dinámica de la organización depende más de la decisión política que de los ritmos administrativos, explicaría que en términos económicos sí haya una recuperación importante. Vemos que tras una caída del primer trimestre, el segundo sube incluso más que en años anteriores, lo que indica que hay menos contratos, pero los que hay tienen un mayor importe tanto de licitación como de adjudicación. 

Qué y cómo se ha contratod: menos obras, más procedimiento abierto 

El contexto de retracción de la contratación local tiene un reflejo claro en las necesidades cubiertas por la compra pública. Analizando los datos de esta primera mitad del año tenemos que, aunque el peso de las obras cae normalmente en el primer semestre, la dinámica habitual es un parón de enero a marzo y una recuperación entre marzo y mayo. En 2023 esta tendencia se ha cambiado posiblemente para poder iniciar o terminar trabajos antes de las elecciones. Esto hace que la contratación de suministros y servicios se mantenga, incluso sube ligeramente respecto al primer trimestre. Como sabemos, estas áreas de contratación dependen menos de la administración local y son administraciones más amplias menos dependientes del mandato político, especialmente  para contratos de consumo habitual, como pueden ser precisamente los suministros o los servicios. 

En línea con esta aproximación podemos ver que el procedimiento más habitual en municipios pequeños y medianos, el abierto simplificado en cualquiera de sus dos modalidades, ha bajado 6 puntos en el total de la contratación desde finales de 2022. A su vez, los procedimientos abiertos, que responden a expedientes que inician su tramitación en torno a finales de 2022, y los acuerdos marco tienen un peso mayor que el que tenían los últimos periodos de análisis. En el caso de los contratos negociados sin publicidad, se mantienen de manera muy estable por debajo del 10%

La competencia y los desiertos: la inflación da un respiro

La tendencia inflacionista ha dado signos de deceleración y de aproximación a parámetros relativamente “normales” para el periodo de junio. Sabemos que la compra pública se ha visto afectada en término de competencia, bajas respecto a lo licitado y, especialmente, los contratos desiertos. 

De cara a la competencia, se rompe una tendencia iniciada en la segunda mitad de 2022 que había llevado la competencia media a menos de 3 ofertas por contrato. En este caso se supera por lo mínimo con 3,01 ofertas por contrato. También hay una ligera mejoría en las bajas, situándose en el 10,14. Si bien estos datos son más positivos, procedimientos como los contratos basados en acuerdo marco, que han tenido más peso en este trimestre, tienen menos competencia y bajas en su último periodo de licitación. Posiblemente, una contratación que recupere los procedimiento simplificados, más competitivos en este punto, refleja un cambio mayor, aunque ya de por sí, este cambio de tendencia tras un año es algo positivo pero insuficiente. 

Los contratos desiertos sí dan un resultado más visible, bajando drásticamente por debajo del 9% a cifras similares a las del inicio de la crisis inflacionista de 2021. Hay que considerar que, igual que señalamos como los datos de sobrerrepresentación de los acuerdos marco podían reducir las ventajas de la caída de la inflación en este trimestre, aquí pasa lo contrario: muchos contratos que pueden quedar desiertos, como los simplificados, algo menos generosos en su presupuesto, han reducido su peso en el conjunto de la contratación. Es probable que en un contexto normal suba el número de contratos desiertos, aunque probablemente por debajo de lo que veíamos estos últimos dos años. 

La contratación europea ¿tocando techo?

La última parte del estudio trimestral la dedicamos a la contratación de los Fondos Next Generation. En este caso encontramos que el nivel se mantiene bastante estable respecto al trimestre anterior y en una línea muy parecida a la de los cuatro últimos periodos, por encima de 1500 contratos derivados. Podríamos considerar que este crecimiento podría ser mayor con la participación de los entes locales, pero sabemos que el peso que tienen es algo menor que en otros ámbitos de la contratación.

La cuestión más interesante es que, después de dos años de crecimiento bastante acelerado, nos encontramos en un punto en el que cuesta crecer. Esto se puede deber a que simplemente no hay necesidad de tramitar más contratos, o bien a que las administraciones han alcanzado un punto máximo de tramitación de este tipo de procedimientos y no tienen más vías de crecimiento Esto tendremos que observar a lo largo de los próximos periodos. 

En  términos de competencia encontramos que estos contratos tienen un comportamiento algo mejor que el resto de la contratación, con una competencia media de 3,8 ofertas por contrato y por encima de 13% de baja respecto a lo licitado. En este caso el comportamiento ha sido de un ligero retroceso respecto al trimestre anterior. 

En resumen podemos decir que ha sido un periodo muy marcado por el impacto del proceso electoral, sobre todo a nivel local y todo lo que conlleva tanto en número de contratos como en necesidades cubiertas. Esto nos lleva a preguntarnos si se recuperará lo que no se ha contratado a lo largo del año y, de ser así, cómo se hará y qué cambios puede suponer en la contratación que realizan estas entidades. Por otro lado, parece que la inflación puede empezar a dar un respiro a los mercados públicos, si bien la reducción del peso de los municipios en este último período hace que tengamos que seguir estos datos con atención. Los contratos del Plan de Recuperación parecen mantener el mismo ritmo de los últimos 12 meses, lo que puede indicar que se ha tocado techo en la capacidad de gestión de las Administraciones Públicas en España.

Metodología

El estudio se ha realizado con los datos obtenidos por Gobierto Contratación de las plataformas de Contratación de Catalunya, Madrid, País Vasco, Andalucía y del Sector Público hasta el 30 de junio de 2023. Se han excluido los contratos menores así como los contratos que tienen una baja superior al 60% para mantener la consistencia de precios.

Foto de Daiga Ellaby en Unsplash

Jul 6, 2023
cerrar
¿Te ha interesado esto? Recibe nuestras novedades
.